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Mostrando entradas de junio, 2015

Autoestima.

Aunque parezca que no y aunque nos pinten como seres que nos infravaloramos y que pensamos que no nos apreciamos lo suficiente, es mentira. Al menos en parte.  Que yo sepa las mujeres no nos pasamos el día autocompadeciendonos de nosotras mismas. Solo hay momentos en los que la presión nos puede y nos venimos a bajo , y seguramente esas veces sean bastantes más que las de los hombres o esa es la visión popular ( hace poco hicimos en clase una encuesta sobre autoestima y las mujeres dieron puntuaciones más altas que los hombres). El caso es, por ejemplo, que cuando tenía el pelo fucsia me levantaba y me miraba en el espejo me gustaba, me alegraba el dia tener un toque de color potente en el pelo, era muy divertido. Pero hubo un dia donde no-se-que-pasó que se me subió la moral sola y me vi genial, fantástica, no creida rollo "soy la más guapa y la que está más buena". NO. Fue un "dios, me gusto!" Y me gustaba a mi misma y tres pares me imporataba que a mi abuela

Dias regulares.

Al principio iba a escribir sobre cómo afrontar un mal dia.  Después de llegar tarde a un examen, tener una mini-bronca por parte de la profesora delante de dos clases de universidad nivel "hasta que no te sientes no empezamos", mas otra mini bronca de un compañero nivel "no vuelvas a llegar tarde" *cara seria y mirada fija* y auto-odiarme por eso y por ir confiada por encima de mis posibilidades al examen y salir pensado "quiero irme a casa a utoodiarme", al final he acabado en un bar con una jarra de cerveza en la mano, ríéndome (aunque fuera a costa del alcohol) y encontrando alguna historia de consolación de una amiga que también llegó tarde a un examen. Gracias, de verdad. Por no querer no quería ni besos, pero ese es otro tema.  Después, he ido a casa a afrontarlo con un buen plato de macarrones con tomate y queso en polvo (y a no sentir ni el más mínimo remordimiento porque creo que ya he cubierto el cupo de malos sentimientosp or hoy ), ver el