Respuesta feminista a las respuestas feministas de 'Quiero estar soltera pero contigo'.

Y yo pensaba que no, pero sí. Cómo no se me pudo ocurrir que todo lo que se publica en internet tiene una crítica, u otra visión. Sea como sea me sorprendió ver que se trataba de algo que, en principio, yo había leído con ilusión hacía un par de meses. Cuento la historia:

Fue en Agosto cuando mi pareja me dijo que había encontrado un artículo que "nos define perfectamente, excepto en algunas cosas" y lo leí. Dicho artículo era en realidad la carta de 'Quiero estar soltera pero contigo'. 

La leí rápidamente pero con atención y me pareció increíble que acertara en tantas cosas que hacíamos juntos y me alegraba que él pensara que éramos, en parte, así.

Como ya he dicho antes, en algunas partes nos sentíamos muy identificados (por ejemplo cuando dice " a la que le encanta cuando te pierdes en tu mundo de musica") pero en otras pegaba poco o nada con nosotros (por ejemplo no somos los que imaginamos un apartamento juntos aunque sepamos que no vamos a vivir en él o lo de "quiero que estés orgulloso de decir que estamos juntos". No le encuentro ni pies ni cabeza). 

He pensado muchas formas de cómo exponer mi punto de vista y al mismo tiempo hacer una pequeña crítica a las dos respuestas feministas que he encontrado.

He decidido que iré poniendo los cachitos de la carta original que más controversia crean, luego la versión más crítica, des pues la light y luego mi opinión. Todo en diferentes colores para que no os hagáis un lio. 


"Quiero que vayas a tomarte una cerveza con tus amigos, para que al día siguiente tengas resaca y me pidas que vaya a verte porque te apetece tenerme entre tus brazos y que nos acurruquemos."


¿Para qué vas a salir de fiesta conmigo pudiendo tenerme como mami-enfermera? No, cachorrito, tú emborráchate tranquilamente . Yo me quedaré en casita y me levantaré temprano para ir a llevarte el desayuno y aguantarte la cabeza mientras vomites.

No quiero ir a cuidarte tras tus juergas. Llámame cuando te encuentres bien. Que cuando quieras estar conmigo sea porque te apetece disfrutar de mi compañía, no porque necesites que te atienda.

Yo lo de la cerveza lo traduzco en "me gusta que tengas planes". Y es verdad por que se lo que se siente siendo pareja de gente que no sale de casa nunca. 
En ningún momento dice que tengamos que ir a cuidarle. Él puede pedir lo que le de la gana, por pedir que no falte; otra cosa es que nosotras vayamos detrás como "mamis-enfermeras" o que pasemos de su cara de manera olímpica. Y ni una ni otra. Pero ojo: ni yo quiero ir a sujetarle la cabeza mientras vomita ni yo quiero que venga él a hacerme lo mismo. 

A veces él ha tenido resaca y me ha llamado; otras la resaca la he tenido yo y le he llamado y sabiendo como es una resaca, no creo que a ninguno de los dos le apeteciera tener al otro al lado. De hecho, hubo una vez que durmimos juntos, nos levantamos juntos y tuvimos resaca juntos y no es una experiencia agradable. La preocupación fué recíproca.


"Quiero que me hables sobre las noches que sales con tus amigos. Que me digas que había una chica en el bar que te ponía ojitos. Quiero que me mandes mensajes cuando estés borracho con tus amigos para que me digas chorradas, sólo para que puedas estar seguro de que yo también estoy pensando en ti."


Ya hemos quedado en que yo no salía. Es lo justo. Sobrio no hace falta que me los mandes, sólo haciéndolo borracho sé que lo haces con sinceridad. Sin olvidar que tienes que estar seguro de que estoy pensando en ti incluso cuando no estamos juntos. Porque eso no es naaada controlador y aparte es lo más normal teniendo en cuenta que, no lo olvides, estoy soltera.

No soy esa espectadora paciente que te escucha con admiración, no trates de narrarme batallas de galán nocturno porque son aburridas e innecesarias. Me fío lo suficiente de ti como para saber que si, así lo hemos consensuado antes, no harás nada con esa chica. De modo que no seas fanfarrón conmigo.

La primera que llama a las 3 de la mañana borracha para decir tonterías soy yo. No fue para decirle qué estaba haciendo, ni para tenerle controlado a él. Le llamé sin ninguna intención. Iba borracha, por dios! Me acordé de él y lo busqué en la agenda; fue impulsivo. Luego él me dijo que por favor no diera por su puesto que él estaba despierto a esas horas aunque fuera verano. Fallo mio: le pedí perdón y ahora me limito a los audios.  

Cada vez que salimos tenemos historias chachis que contarle al otro. Me gusta que me hable de las noches que sale con sus amigos, es divertido. Y me gusta hablarle de las mias con mis amigas. 

Los audios cuando salímos también son divertidos. No "quiero que" me los mande, "me gusta que" me los mande. Este verano sobretodo, por las mañanas me levantaba y tenía notas de voz suyas en las que en realidad hablaban sus amigos muy tajas diciendo cosas incomprensibles y luego se oía su voz diciendo "bueno pues eso es todo, que me lo estoy pasando de puta madre, ya te contaré". Supongo que en ese momento, al igual que yo el dia de la llamada, se acordó de mi y le pareció buena idea enviarme dos o tres audios seguidos de incomprensibles historias. Y dudo mucho que le importara si en ese momento yo estaba pensando en él o no pero cuando me las mandó sí que lo hice. Y a parte de reírme pensaba "me alegro de que se lo esté pasando bien". 

Hay veces que me acuerdo de él en una fiesta y no le mando audios. Y puede que viceversa también. ¿Des de cuando mandar audios borracho es de ser controlador? Si es así, con la cantidad de audios-sin-sentido que nos hemos mandado este verano, estoy en la relación más controladora que he tenido en la vida. 

En la carta no dice nada de que sobrio no hace falta que mande mensajes. Ni de que él es el único que sale. Eso lo interpreta ella, pero ni lo dice ni lo da a entender. También le envio audios sin ir borracha porque no me apetece escribir y son cosas sobre apuntes y la universidad. Y al revés. 

Hablemos de lo de la chica que le pone ojitos. En mi caso, los dos hemos pasado por esa situación, nos lo hemos contado, nos hemos reído, hemos hecho bromas al respecto y hemos elevado la historia a la categoría de anécdota. 0 dramas. Ni pienso que se hace el chulito conmigo, ni él piensa que le doy pie a todo el que se me pone por delante. Eso no quita que dentro de las bromas él interprete el papel de "me las llevo de calle" y yo de "devora-hombres". Hay que saber pillarle el humor a todo. No somos celosos porque tenemos autoestima y confiamos en uno en el otro, hemos puesto unos límites que pueden ser revisados pero los actuales los respetamos. 


"Quiero que nos riamos mientras hacemos el amor. Que empecemos a reírnos porque estamos probando cosas nuevas y no tienen sentido. Quiero que estemos con nuestros amigos, para que me cojas de la mano y me lleves a otra habitación porque ya no puedes aguantarte más y tienes ganas de hacerme el amor ahí mismo. Quiero intentar permanecer en silencio porque hay gente y nos pueden oír."


Sé que todo esto puede sonarte terriblemente novedoso porque ninguna pareja oficial lo ha hecho nunca jamás. Pero soy tan moderna y tan tremendamente transgresora que tenía que decírtelo. Es que cuando tienes novio y todo eso ya no te ríes en la cama, hablas de hipotecas, furúnculos anales y los descuentos del Lidl. Ni te dan calentones, por supuesto. Es algo super novedoso que hemos introducido las “solteras contigo”.

Por supuesto que quiero que nos riamos mientras hacemos el amor, pero esa complicidad puede traducirse también en sentirme cómoda contigo sin depilarme o teniendo la menstruación. Respétame, porque si estoy reunida con amigos esa es mi única prioridad en ese momento, si tú no te aguantas las ganas tendrás que irte solo, porque yo no me voy a ir.
También quiero que la expresión “probar cosas nuevas” no signifique que tú des rienda suelta a todos los estereotipos y prácticas que la pornografía convencional te ha enseñado a desear y que yo acceda de forma complaciente a ello. Más bien pretendo que probar cosas nuevas signifique hacer algo nuevo de verdad y quiero que tú no tengas prejuicios cuando llegue el momento de ponerlo en práctica. 

La primera crítica da por supuesto que todas las que tenemos/hemos tenido una relación sabemos, desde la primera experiencia amorosa, que por muy seria que sean las cosas con tu novio, siempre te puedes reír con él. Espero que no lo diga enserio.

Las relaciones amorosas no son un camino de rosas (viva la rima). No todos son divertidos, algunos son muy serios, con algunos te ríes hasta que empiezas a salir y luego se les termina el arsenal de chistes, con otros las bromas te hacen gracia hasta cierto punto y otras veces te cansas siempre del mismo humor, que va perdiendo el sentido a medida que avanza la relación. Luego están con los que no te has reído nunca, y eso, a mi parecer, es grave. 

Reírte con alguien con la misma intensidad después de un largo tiempo juntos es difícil. A algunos (más que a algunas) si que habría que decirles "oye, que el buen rollo no se acabó cuando me pediste salir, eh" porque parecen que se toman muy al pie de la letra eso de estar en una "relación seria". 

Para mí el "quiero que nos riamos mientras hacemos el amor" es un "quiero y me gusta que nos riamos." Sin más. Ya sea por probar cosas nuevas, por hacer el capullo juntos o por separado, porque encontremos a alguien/algo que nos haga gracia... me da igual. 

Por otra parte eso de estar cómoda sin depilarse o con la menstruación... no es real. Con lo último si, que yo sepa nunca he tenido problemas de comodidad con él en ese tema. Con lo primero no. Se piensan que cuando una se da cuenta de que és feminista se le quitan de un plumazo todos los estereotipos y vive feliz y libremente como a ella le da la gana. Pues no. La tarea de quitarse los complejos es larga y fastidiosa. Yo me sigo depilando por que no me encuentro a gusto con ciertos de mis pelos en determinadas ocasiones, y estar con él es una de ellas. Y supongo que él también tiene estereotipos y no se encontrará a gusto con ciertos de mis pelos en ciertas ocasiones. Cuándo y qué pelos quitarme es cosa mia, los dos lo sabemos. Y por suerte podemos hablar de ello con totaaaaaal naturalidad (de echo a él se le da mucho mejor que a mi). 

Como anécdota: a mi parecer, tenía muchos y muy largos pelitos negros en los brazos. A veces me incomodaban, a veces no pero los aceptaba hasta que un día empezaron a parecerme más molestos de lo normal y dije "pa'fuera". La verdad: me gustan más como se ven mis brazso ahora, están muuuuuy suaves, pero eso no es lo mejor: he ganado en sensibilidad. Noto el frío y el calor con muchos más matices y todo lo que me toca lo noto multiplicado por 10. Contentísima le enseñé los brazos y le dije "adivina lo que me he hecho". Se pasó un rato largo buscando y mirando y me dijo "te has cortado las pulseras". "Si, pero a parte de eso, ¿qué más notas?". Y siguió mirando los dos brazos otro rato hasta que le dije "¡me he depilado!". Estaba a un palmo de ellos y ni lo notó. Luego me miró y me dijo "¿y a ti quien te ha dicho que me gustaran sin pelitos?". Me sorprendió mucho saber que ni se había dado cuenta, ni le importaban mis pelos de los brazos pero le respondí "no lo he hecho por ti, sino por mi" aunque eso él ya lo sabía. Y los dos tan contentos. 

Lo de probar cosas nuevas yo la primera vez que lo leí lo interpreté al revés. No es que a él hubiera que pararle el carro porque, como dice la segunda crítica, él iba a querer poner en práctica todo lo que la pornografía industrial le había metido en la cabeza y yo iba a ser un sujeto pasivo e iba a acceder a todos sus deseos. Error. Y otra vez entra en juego lo que cada una a vivido. En mi experiencia, los que no quieren probar cosas nuevas (y si que es verdad que tienen bastantes prejuicios) son ellos, no yo. Yo daba rienda suelta a la imaginación y hacía propuestas y todo lo que escuchaba era no, no, no y no. Para mi lo desconodico era exitante y para ellos, terrorífico. Así que me reafirmo: sí, quiero probar cosas nuevas y sobre todo si no tienen sentido.

En cuanto a la escena de coger de la mano y llevarlo a otra habitación, ahí me identifique yo porque un dia nos pasó algo parecido. Estabamos en casa de un amigo, de fiesta y bebiendo y en un momento en que la gente estaba dispersa lo cogí de la mano y me lo llevé a una habitación vacía, porque había un balcón y quería enseñarle las vistas. 
Luego entramos y la habitación seguía vacía, a oscuras, estábamos los dos, habíamos bebido... querido amigo, si me estás leyendo quiero que sepas que no mancillamos nada. 
Pero para qué negarlo: lo miré, se me subió la temperatura y lo llevé para adentro. ¿És censurable lo que hice? ¿Soy menos feminista por tener un calentón y querer estar un rato a solas con él? En ningún momento me dijo que no quería estar allí, nadie nos echó de menos y a nadie le pareció mal lo que hicimos. En el caso de que se hubiera sentido incómodo o no le hubiera parecido el mejor momento para hacer eso estoy segura de que me lo hubiera dicho. 

Pero con esto quiero decir que los impulsos sexuales no-se-controlan. Una cosa es que estemos de manera informal con un grupo de amigos de jiji-jaja tomando algo en un bar y cojas y me arrastres al baño (que eso va a ser que no), y otra muy diferente lo que pasó aquella noche. 


"Quiero tener miedo contigo. Hacer cosas que no haría con nadie más, porque contigo me siento segura. Volver a casa muy borracha después de una buena noche con amigos. Para que me cojas la cara, me beses, me uses como tu cojín y me abraces muy fuerte por la noche."

Obviamente para ello necesito un hombre, ¿cómo podría sentirme yo sola segura? Y a todo esto, ¿no te has olvidado de que en ningún caso quiero reproducir el estereotipo de pareja antigua hombre-protector , mujer-desvalida, verdad? Ayyy una vez más, el sueño de toda mujer empoderada e independiente. Soñar con la decoración de nuestro apartamento y que me uses de cojín.


No quiero tener miedo contigo, porque tener miedo con o de tu pareja no significa nunca nada bueno. No quiero que me protejas, que me agobies; no soy un ser débil e indefenso, si con alguien tengo que sentirme segura es conmigo misma. Soy fuerte, sé lo que quiero y puedo valerme por mí misma.

Cuando esté con mis amigas y amigos, no siempre quiero que tú vengas para después cogerme la cara y besarme, a veces me gusta dormir sola con toda la cama para mí. Y si duermes conmigo no voy a ser tu cojín, ni la muñequita que te acompaña esta noche en la cama.
En este aspecto coincido con las críticas de los dos artículos aunque la que mejor expresaría mi opinión es la segunda, expresa lo que pienso perfectamente, no añado más. No me gusta tener miedo, ni contigo ni sin ti y mucho menos quiero tenerlo. Y lo de la cama está más que claro. Me-encanta dormir sola y con una cama bien grande todita para mí. 


Y cuando llego borracha a casa... bueno, no me apetecería nada que me besaras en ese estado porque mi boca no debe de ser un jardín de rosas en esos momentos, o que me abrazaras cual cojín porque seguramente lo que pase es que te vomite en la cara. 


"Quiero que tengas tu vida, para que decidas irte de viaje unas semanas por puro capricho. Para que me dejes aquí, sola y aburrida, deseando que salte tu carita en Facebook diciéndome 'hola'."


Ya sabes que soy super independiente yo también y que esta es una relación muy igualitaria. Tú de vacaciones y yo esperando que se te ocurra mandarme una puta cara cuando estés cagando en el vater. Y encima me sentiré super especial. De verdad nenas, si habéis tenido los santos ovarios de compartir este trocito en concreto como “uuuh ultra romááááántico”. os merecéis este tipo de relación. No pa siempre, que no soy tan mala, pero a modo coscorrón emocional-espabilador, si.

Voy a viajar por puro capricho y sin ataduras, voy a viajar por trabajo, por asuntos familiares, por lo que quiera… Eso es cosa mía y de nadie más, no voy a quedarme esperándote, ni te voy a dar explicaciones sobre ello.


Me gusta que tenga su vida y que le de por irse de viaje cuando le de la gana. Mientras escribo esto él está por ahí y yo he estado sola y un poco aburrida en casa. Y me alegraré si me manda algún mensaje diciéndome que no se ha despeñado por alguna montaña. 

Eso no quita que el resto del puente yo me haya pasado dos dias seguidos de fiesta y conciertos aun estando enferma. O que en otras ocasiones yo me haya ido de viaje "por puro capricho" mientras él se quedaba en casa. 

No deseo que se pase la vida pensando en mi, que cuando se vaya de viaje me tenga en sus pensamientos siempre. Me gusta que se relaje, que se divierta, que haga cosas locas. ¿Por qué? Por que a mi me gusta hacer lo mismo y tampoco le tengo en mi mente las 24h del dia.

Lo de "para que me dejes aquí, sola y aburrida" a mi modo de ver no es más que una expresión que si se literaliza da lugar a interpretaciones muy libres. Perfectamente cuando él vuelva yo le podría decir "me has dejado aquí, solita y aburrida" y no seria verdad ninguna de las tres cosas. Ni me ha 'dejado' (como si yo le tuviera que acompañar allí donde va', ni me he aburrido tanto, y la soledad es un sentimiento. Aunque solo esté yo en mi casa, no me he sentido sola en lo que me quedaba de puente. 

Y él me podria haber dicho lo mismo las veces que yo me he ido de viaje y tooooodos sabríamos que es una expresión, una broma, una forma de hablar. Yo me compadecería de él fingiendo pena y le diria que la próxima vez me lo llevaría en la maleta a modo de mascota. Y seguiría sin haber dramas porque quien no entienda la ironía, está perdido. 

Que si, que vale, que tu puedes viajar donde y cuando quieras "y no te voy a dar explicaciones de ello". Muy bien. O sea que tienes una relación estable y decides irte un fin de semana, yo que se, a ver a una amiga a Londres. Os despedís el viernes y le dices "ya nos veremos la semana que viene". Vuelves y cuando te pregunta que has hecho el finde le dices que has estado en Londres visitando a tu amiga. Su cara debe de ser de poema. "Que interesante, pero, ¿por qué no me lo has contado? Te podría haber ayudado a organizarlo o algo" y tu, toda digna, independiente y empoderada le contestas "porque soy autosificiente y no te tengo que dar explicaciones de nada de lo que hago porque eso es de ser controlador y siento que me minas la libertad cada vez que te expico donde voy y qué hago". Bueno, en este caso lo que dais a entender que llamáis control, yo le llamo comunicación de pareja. 

Control, bajo mi punto de vista, sería decirle donde estás cada vez que cambias de sitio. O que él te preguntara dónde estas, con quien y que estás haciendo para saber que no harás, a su juicio, nada indebido. Por desgracia se lo que se siente cuando te hacen eso y por suerte se diferenciar entre eso y comunicar a la otra pareja los planes que tienes. 

Poniéndome como ejemplo: este año tengo planeado ir a Francia a ver a una amiga. Él lo sabe, pero no todos los detalles del viaje porque son aburridísimos. Flipando nos quedaríamos los dos si yo dentro de unos meses le dijera "ale chao, me piro a Francia" o que él me dijera a mi "¿te vas a Francia y ni siquiera me has dicho con quien, ni dónde duermes, ni cuándo vas a volver, ni qué vas a hacer por allí?". Ninguna de las dos cosas me parecen buenas. 


"No quiero que siempre me invites a tus juergas, y no quiero invitarte siempre a las mías. Así, al día siguiente puedo contarte cómo fue la noche y tú puedes contarme la tuya."


Cosa que ninguna pareja debería hacer, ya he mencionado antes que cuando te echas novio se acabó lo de salir por separado. Esto lo hacemos porque somos solteros, rebeldes y antisistema.

Por desgracia hay gente que no concibe una relación de pareja sin que ambos vayan a las mismas fiestas y juntos. Cuántas veces hemos escuchado a esa amiga con novio a la que le han invitado a una fiesta y la conversación es tal que así:

- No se si voy a ir.
- ¿Por qué? Va a estar todo el mundo, y hace tiempo que no nos vemos. Llevamos planeándolo una semana...
- Ya, pero   (insertar      nombre       del       novio)   no va.
- ¿Y qué? ¿A ti te apetece ir? Pues ves y ya está. Ni que tuviérais que ir juntos a todas partes.
- No, si no es eso. Es que quizás, si voy... pues seguramente se moleste. 

A esta respuesta, nosotras ponemos cara de "WTF" con ojos de plato, le damos la charla que el 70% de las veces no sirve para nada y la historia termina con ella en casa y tu de fiesta echándola de menos. 

La frase del artículo yo ya la doy por hecha, pero hay personas que les pueden enseñar ese trocito a su pareja y decirles "yo quiero esto" porque no lo tienen y porque por primera vez, aunque se le puedan sacar varios defectos a la carta o al modo de escribirla, de alguna manera define lo que ellas (y ellos) no tienen, que es un poquito de libertad. Un poco de desapego el uno del otro, de "tu por tu lado, yo por el mío y luego un espacio para los dos juntos". Hay gente que quiere eso y no sabe cómo expresarlo. No todas las tias son feministas y no todas las feministas tienen conciencia profunda sobre el tema. 

Conozco a más de un par de personas (y eso es preocupante) que tienen relaciones tan oprimidas que cuando leen esto les parece la cosa más novedosa del  mundo. Porque en comparación a lo que ellas viven esto es lo más, es, encierta manera, ser "rebeldes y antisistema".


"Quiero algo que sea simple y, a la vez, complicado. Algo que haga que, a menudo, me haga preguntas a mí misma, pero que, en el momento que esté contigo en la misma habitación, desaparezcan todas las dudas. Quiero que pienses que soy guapa, que estés orgulloso de decir que estamos juntos.


Cuando follamos no me gusta ponerme trascendental, me compensa absolutamente que me hagas sentir una princesa 3 horas y media semanales aunque pases de mi culo serrano el resto del tiempo.  Bueno, tú presume. Mi autoestima y mi autoconcepto están en tus manos. 


Si no te gusto físicamente, vete; si no quieres quedar conmigo, vete también. Esto no es un plus al que yo tenga que llegar, o te gusto como soy o no te gusto, no voy a cambiar por ti. 


Disiento el lo primero de todo: no, no me gusta lo complicado. Puede, por circunstancias de la vida, llegar a complicarse pero evitaré por todos los medios que eso ocurra. Si tengo que elegir, prefiero algo simple como sinónimo de algo claro, algo consensuado entre los dos, con buena comunicación y sin malentendidos.

Bien, lo de que me hago preguntas a mi misma ocurre, y lo de que cuando estoy con él se me olvidan la mitad, también. No es algo que quiera que pase, pasa y punto. Aunque, como todo, hay veces que no me hago preguntas en absoluto, y otras en las que sigo rayada estando él en la habitación. No le veo más vuelta de hoja.

En lo siguiente, estoy de acuerdo con la primera y segunda crítica. Estas conmigo, ¿no? Pues ya está. Como si piensas que soy el orco más feo de Mordor. Te gusto porque has encontrado algo en mi que te atrae o porque ese dia los astros se alinearon. No voy a estar todo el dia preguntándome el por qué para alimentar mis inseguridades. Mi autoestima y mi autoconcepto dependen de mi, no de ti. Y eso de que estés orgulloso de que estemos juntos... no se. Estamos juntos y ya está, ¿no? No entiendo muy bien eso del orgullo (orgulloso de ser Español, orgulloso de la Patria, el orgullo de la Nación, etc) pero no pilló por qué ese sentimiento debería de formar parte de nuestra relación.


"Quiero que me digas te quiero y, sobre todo, poder decírtelo yo a ti. Quiero que me dejes andar por delante de ti para que puedas ver cómo se mueve mi culo de lado a lado. Para que me dejes arañar las ventanas de mi coche en invierno porque mi culo se contonea y eso te hace sonreír."


¿Para qué estoy yo en este mundo si no es para eso? Mujer objeto es mi destino marcado por las estrellas.

En el momento que lo leí aún no nos habíamos dicho nada y fue como "jijijijiji". Pero si, supongo que me gusta que me lo diga y decírselo yo a él. Lo de andar delante de él para que me mire el culo, ambos sabemos que lo hago a posta. Y lo de que yo me pongo debajo de él en las escaleras mecánicas para mirarle el culo... espero que solo lo sepa yo. Oh, matadnos, somos personas objeto. Y todo eso que sabemos y no nos decimos nos hace sonreír. 


"Quiero hacer planes sin saber si al final los realizaremos. Estar en una relación clara. Quiero ser esa amiga con la que adoras quedar. Quiero que sigas teniendo el deseo de tontear con otras chicas pero que me busques a mí para terminar la noche juntos. Porque quiero ir contigo a casa."


Tengo una dignidad a prueba de fuego, ¿ya te has percatado, no?. Porque quiero ir contigo a casa. Me hace sentir tan especial que perrees con medio bar y que cuando te aburras decidas apuntar a lo seguro y me hagas un llama-cuelga. 

No soy la princesa que te anhela, no quiero estar feliz de que tú me elijas para pasar la noche entre las muchas chicas con las que has tonteado.
Hombre, a mi me gusta hacer planes y saber que los vamos a realizar, pero en fin. 
Y si, me gusta que nuestra relación sea clara más que nada por los malentendidos (que he tenido en otras relaciones, y no pocos ni pequeños) y por que no hace falta complicarse mucho la vida para ser feliz. 

Si, somos amigos y espero que le guste quedar conmigo. Yo alguna vez se lo he dicho: cuando hemos estado un tiempo largo sin vernos ya no es que le heche de menos como pareja (besitos, abrazos, etc), que también; sobretodo le echo de menos como persona porque me parece interesante, porque siempre tiene algo que contarme y podemos estar horas hablando sin nada que pueda dar pie a una persona a pensar que somos pareja porque también somos amigos. 

La última si que no la entiedo. Me parece natural que te fijes en otras, yo también lo hago. Pero que sea yo la que te tenga que aliviar después de haberte puesto burro con las otras del bar, por ahí no paso. 


"Quiero ser esa a la que le haces el amor y después te quedas dormido. La que te deja en paz cuando estás trabajando y a la que le encanta cuando te pierdes en tu mundo de música. Quiero tener vida de soltera contigo. Porque nuestra vida de pareja sería igual que nuestras vidas de solteros de ahora, pero juntos."

El amor me lo haces TÚ. No lo hacemos. Es magnífico, lo único que la próxima vez acuérdate de sacarme la chorra de dentro antes de empezar a roncar.¿Te he dicho ya cuánto me mola ser la puta pesada de la que pasas como el culo? Oh, dulce sensación de juguete-segundo-plato.

Quiero que me dejes en paz cuando esté trabajando, escribiendo o perdida en mi mundo de música, porque todo esto constituye una parte importante en mi vida, en mi desarrollo laboral, personal, artístico y académico. Déjame ser, no me cohíbas, no me interrumpas, no creas que ese tiempo mío también te pertenece a ti, no te atrevas a valorar si se trata de un tiempo bien invertido o no.

Joder como se ponen algunas de puntillosas. "Quiero que me hagas/quiero hacerte/quiero que hagamos", coño, la cosa es hacerlo. ¿Y si pusiera "quiero ser esa que te gusta que te haga el amor"? ¿O "quiero ser esa a la le gusta hacerte el amor"? Ahí no diriamos nada porque la voluntad proviene de ella y eso está bien. Coño, pues lo dijo así como lo podría haber dicho al revés. Quizás prefiera que se lo hagan a hacerlo, es decir, a tener un papel menos activo en la cama. ¿Es que eso también está mal? ¿También tiene que tener energía lo mismo para combatir en heteropatriarcado que para follar?

Cuando los dos tenemos proyectos/ trabajos/planes/etc nos dejamos en paz mutuamente. A mi me gusta hacerlo porque es muy aplicado, se concentra enseguida y no me gusta molestarlo. Y a mi me gusta que lo haga porque me cuesta concentrarme, me distraigo con una mosca y cuando pillo el ritmo no me gusta soltarlo. 

Y sí, sí y mil veces sí. Soy esa a la que le gusta que se pierda en su mundo de música. Para él la música es una de las partes más importantes de su vida. Se puede pasar horas hablándome de música, se va por las ramas, pasa de un tema a otro sin darse cuenta y básciamente, como dice la frase, se pierde. Y es maravilloso verle la emoción que le pone cada vez que me cuenta o me enseña algo relacionado con la música. Yo a mi pareja no sería capaz de entenderla sin la música y sin su "mundo" de música. Y, a mi parecer, juega un papel importantísimo en nuestra relación. 

A mi también me gusta, y también la vivo a otros niveles. Voy a todos los conciertos que puedo, me devoro las revistas y artículos de música, me paso el dia en Spotify, me veo videos y videos de gente haciendo versiones, tengo momentos muy fan e incluso puedo y  divido mi vida por las canciones que he escuchado. Y me gusta estar ahí, en ese mundo y que nadie me interrumpa, como no me gusta interrumpirlo a él. 

Pero lo de él es a otro nivel. Una de las cosas que más me gusta que haga es cuando se acerca mucho a mi y me canta en bajito las notas de las canciones que él toca en la banda. Yo me quedo empanadísima mirándolo. Al igual que me lo quedo mirando cuando está por mi comedor cambiando cada dos por tres de canción mientras va de aqui a allá tocando un saxo invisible, como si las notas las estuviera tocando él en ese momento. 

Y a mi, por si no se me ha notado, me gusta escribir. Escribo todo el dia, a cualquier hora, en cuanto me apetece. Y no me gusta que me interrumpan mientras lo hago. Y yo digo, ¿hace falta una crítica a eso, porque, de alguna manera, no se da ya por hecho? No me parece mal que se comente, que se aclare y que se la incluya a ella pero me parece taaaan obvio en una relación sana. 

Me acuerdo cuando hablamos sobre las dos últimas frases. Por primera vez en mi vida no me siento agobiada, aprisionada, menos libre que si no quisiera a alguien. Por muy feministas que seamos todas esto no es fácil de conseguir. Han sido años de malas experiencas en relaciones anteriores, de aprender de muchos errores mios y de los demás para poder disfrutar hoy de lo que comparto con esta persona. 

Hoy puedo decir que hago exactamente lo mismo teniendo una relación que sin tenerla, pero eso no ha sido siempre así, por desgracia. Ellos querian una disponibilidad de mi que yo no estaba dispuesta a dar y que muchas veces he dado por el sentimiento de culpa, por no sentir que era yo la que menos se implicaba. Era un anclaje brutal, una dependencia que rayaba lo insano. 

Ahora puedo gozar de algo que, siento decirles a las autoras de las críticas, no todo el mundo puede decir que disfruta: una relación en la que yo tengo mi vida, él tiene su vida y luego tenemos un espacio en común. Y es genial porque piensa lo mismo que yo respecto a eso. Y si algo no nos gusta nos lo comunicamos como personas civilizadas, con respeto y tacto y no como crios inseguros que no saben lo que quieren y solo exigen.

Y creo que todo esto que yo vivo queria resumirlo la autora diciendo "porque nuestra vida de pareja sería igual que nuestras vidas de solteros de ahora, pero juntos". 

¿Cuántas veces pensé que nunca iba a enconrar a alguien que entendiera que la dependencia no es sana, que las inseguridades se transforman en celos, que lo bonito no es frenar a una persona por miedo a que coja impulso sino ponerle una puta pista de vuelo para que despegue y aterrice y desearle lo mejor?
________________________________________________________________________


Por desgracia es verdad lo que dice la segunda crítica: "Un día no hará falta redactar cartas como esta, porque otras como la de Isabelle Teissier no se escribirán."

Las de Isabelle Teissier no se escribirán por que las relaciones sanas exisitirán y no viviremos en un mundo amoroso donde sabremos expresar lo que queremos y la dependencia no existirá y las inseguridades tampoco (o eso me gusta pensar). 

Pero, ¿cuánto tiempo queda para eso? Muchas luchamos dia a dia para que llegue pronto, sí, pero no hay que olvidar que para muchas tias esto que escribe Isabelle es algo novedoso. ¿A caso todas las que somos feministas empezamos teniendo conciencia completa sobre qué era serlo? ¿A caso nuestra conciencia es total y absolutamente completa ahora? No. No nos levantamos un dia y dijimos "ahora TODO tiene sentido, puto patriarcado opresor, A LUCHAR -hop-hop-" y nos quitamos los complejos y los estereotipos de un plumazo. No, no y no, eso no es así. 

Si hechamos la vista atrás primero empezamos cuestionándonos cosas pequeñas como situaciones con la familia, en el instituto, luego en el grupo de amigos, etc. Y luego poco a poco, con el interés de leer y de saber que muchas se sentían como tú, que no estabas sola con lo que sentías, se fue abriendo un mundo en el que estaba lo visible y lo invisible y fuimos creciendo como mujeres y como personas gracias al feminismo que, poco a poco, seguimos descubriendo. 

Negarles a las mujeres el sentimiento de libertad cuando leen esto es como si alguien, con 15 años, nos negara sentirnos bien con nosotras mismas cuando tuvimos claro que nos podíamos poner lo que nos diera la gana para salir de fiesta pero aún nos sentíamos mal cuando nuestros amigos criticaban lo corta que era la falda y hacían comentarios respecto a nuestro escote.  

O cuando empezamos a entender que cuando nuestro novio nos decía que no le gustaba que quedáramos con otros chicos supiéramos que estaba mal, no lo entendíamos y sabíamos que no tendríamos que hacerle caso pero aun así no quedábamos. 

Negarles a ellas o a ellos que se sientan bien cuando leen la carta de Isabelle al descubrir que lo que quieren es algo que se acerque a eso y que quede lejos de la relación tóxica y controladora en la que se encuentran es no dejar nisiquiera florecer los conceptos feministas de los que se están dando cuenta, aunque no lo sepan o aunque no los quieran llamar así. 

En ningún momento el artículo dice que nosotras no podamos hacer lo mismo. Pero como está dirigido a él, veo lógico que hable de él, hacia y para él. De lo que quiere o le gustaría hacer con él. De lo que le gusta de él. Podría perfectamente haber una carta contraria, de él hacia ella. O de él hacia otro él y otra de ella hacia otra ella. Eso sería genial pero seguro que también habrían críticas.

En una visión general me parece que Isabelle Teissier ha resumido bastante bien lo que la mayoría de nosotras ha deseado en algún momento y luego hemos mejorado, lo que muchas tienen ahora mismo y pueden mejorar y lo que otras personas no disfrutan pero les gustaría. 

Por favor, dejemos de tirarnos piedras entre nosotras, no tachemos de manera general la carta. La verdad es que en toda la carta cambiaría el "quiero que" por "me gusta que".
Vale que ciertas partes son criticables pero esas críticas también son criticables, que es precisamente lo que estoy haciendo yo. Y así podríamos estar la vida. 





Comentarios

Entradas populares de este blog

QUE PARTE DE DROGAS MALAS NO OS ENTRA EN LA CABEZA!

Que es y que no es ser feminista.