Típico caso.

Ni introducción ni leches, intentaré ser breve con la descripción del caso. 

Para mantenerlas en el anonimato, las llamaremos sujetos A y B. Sujeto A es la hija de sujeto B.

A quiere salir un viernes por la noche para ver a un amigo, son las 12 de la noche. B le dice a su hija que esas no son horas de salir, que dónde va a esas horas. La cosa cambia de color cuando B le suelta "parece que vayas buscando el peligro" y entonces A se queda con dos palmos de narices y por no discutir, se va. Para más colmo, A ha tenido que mentir a su madre cambiando la identidad del amigo con el que iba a quedar para no enfrentarse a diversas preguntas. No es que el amigo en particular tuviera nada de malo o el otro fuera mejor, es que el interrogatorio, inútil por cierto, se venir si el amigo es desconocido.

Esto es una situación real, ahora planteemos una situación hipotética.

C es hijo de D. C le dice a su padre un viernes por la noche que ha quedado con una amiga. D le pregunta a su hijo con quién y si está muy lejos la casa. C le responde sinceramente que ha quedado con X y que vive a unos 20 minutos de allí, que no sabe a que hora volverá pero que tampoco será muy tarde. D le dice que muy bien y que ponga la mesa, que van a cenar. 

Luego por qué me sulfuro, por qué me indigno, por que soy tan reivindicativa, pesada, feminazi, "Laura cállate ya", eh. 

En la época de Franco a las mujeres las llamaban las "eternas menores" porque pasaban de necesitar el consentimiento del padre al consentimiento del marido para todo: abrir una cuenta en el banco, comprar una casa, un coche, trabajar, etc. y si no había ninguno de ellos, eran los hermanos los que se encargaban. Ojo que en algunos países islámicos esto es así y mucho peor. Peor bueno situémonos en este contexto socio-histórico y no nos vayamos por las ramas.

A es igual de mayor de edad que C y sin embargo una tiene que mentir/ocultar/aguantar interrogatorios estúpidos sobre quien, donde y cómo va a los sitios y el otro no. A ojos de los padres de A, esta sigue teniendo 17 años, es una adolescente que no ha tomado conciencia aún del peligro que supone salir sola a las 12 de la noche un viernes. Sola eh, no solo. Porque en el caso de que seas hombre eres un potencial violador y en el caso de ser mujer, una potencial víctima. Claros los roles ahí. 

A todo esto ella es la víctima pero la culpable de su "desgracia" ya que "parece que lo vas buscando". ¿Que haces sola, de noche, por calles con poca gente o vacías? ¿Crees que ese es lugar para una muchacha como tu? ¿Es que no puede venir él a verte, tienes que ir tu? Tienes todas las papeletas de que te pase algo malo, y no digo que el que te lo haga sea un cabrón malnacido que se merezca un buen castigo, pero si tu estabas en ese sitio a esas horas, algo de culpa tienes. Ah, no haber estado allí. Te lo advertí, te lo dije, esas no son horas y tu no tienes por qué estar haciendo eso. 

Que manía, PERO QUE MANÍA esa de culpabilizar a la víctima, oye. No neguemos que hay peligro real, no neguemos que hay atracos, agresiones sexuales de toda índole, persecuciones incómodas y silbidos con frases tipo "eh nena, ¿te acompaño a alguna parte?". Existen, pero mi humilde opinión es que no voy a dejar de hacer lo que hago, quedar con quien quedo e ir donde tenga que ir por un puñado de pirados. Y menos, muchísimo menos, porque tengo más papeletas de que me toque una agresión por el simple (que no es tan simple, es complejo) hecho de ser mujer. Antes muerta que salir a la calle con menos derechos que un hombre. 

Esa es mi opinión. Otra puede estar de acuerdo conmigo en todo hasta llegar al punto de qué hacer y preferir quedarse en casa porque no quiere arriesgarse a que se haga realidad. Y no, no le diré "pues si no sales a la calle a demostrar que realmente te importa tu derecho a que te respeten, si no lo demuestras a pie de calle no tienes ningún derecho a quejarte". Ella tiene tanto derecho a quedarse en casa para que no le pase nada (porque podría pasarle) como yo a salir y que me pase, o no. No le voy a decir que salga de buenas a primeras a la calle para que se enfrente a un hombre oscuro y de paso ligero que hace tres calles que te sigue y tu te preguntas si no es lo suficientemente grande el pueblo como para que vayáis los dos por el mismo camino. 

El caso es que estando dentro o fuera de casa, con y sin miedo, seas hombre o mujer, se pueden hacer muchas cosas para evitar este tipo de situaciones y tan válida es mi opción de salir a la calle a las tantas con todas las consecuencias que desde casa cerras cuentas de Twitter a quien va propagando por ahí valores rancios y machistas. 

El mensaje al final es que no nos quedemos quietxs, que siempre hay algo que hacer y que no vamos a menospreciar el trabajo ni la lucha de nadie simplemente porque no sea en nuestro ámbito ya que todas son válidas siempre y cuando el objetivo común sea quemar hasta los cimientos el patriarcado *llamas, rock n' roll, tanananananananana*. Perdón, me he venido arriba. 

En fin, felices días a todos y recordad que el hombre del saco existe y se llama Papá Noel.